sábado, 26 de diciembre de 2009

Humillacion en navidad

No olvidarán con facilidad las Navidades del 2009 los lakers después de ver como el alero jamesy los Cavaliers de Cleveland les daban una lección de baloncesto y una paliza de 87-102 en el partido de la NBA disputado en el Staples Center.


Los Cavaliers con la combinación perfecta del base Mo Williams y James que aportaron 28 y 26 puntos, respectivamente, dominaron de principio a fin el partido para conseguir su tercer triunfo consecutivos.
James, que también logró nueve asistencias, cuatro rebotes y dos recuperaciones de balón, aunque perdió siete balones, dijo que la clave del triunfo había estado en la defensa.

"Jugamos una gran defensa desde el inicio, además que el ataque también respondió y cada uno de los jugadores que estuvimos en el campo hicimos el trabajo", declaró James. "Ha sido un buen mensaje el que hemos dejado con el triunfo".Mientras que los Lakers, con su juego volvieron a enfurecer a los aficionados, que los abuchearon y muestra de su descontento fue el lanzamiento a la pista de decenas de vasos de plástico.

El pívot Shaquille O'Neal, que volvió al Staples Center, también disfrutó de la victoria y de su aportación con 11 tantos y siete rebotes para dominar a los hombres altos de los Lakers, que no pudieron contener sus nervios y mal juego para responder a la frustración con faltas técnicas.

Los Cavaliers les mostraron a los Lakers que son un rival y aspirante serio a luchar por el título de liga con jugadores como los reservas Jamario Moon y el alero brasileño Anderson Varejao que también aportaron 13 y nueve tantos, respectivamente.

Varejao jugó 33 minutos para anotar 4 de 5 tiros de campo y 1-2 de personal, capturó nueve rebotes, líder del equipo y puso un tapón. La presencia del veterano pívot lituano Zydrunas Ilgauskas que jugó 30 minutos para aportar nueve rebotes con dos asistencias, también fue decisiva para el triunfo del equipo de Cleveland.

Kobe no fue suficiente

Los Cavaliers como equipo lograron un 54,3% de acierto en los tiros de campo, el 38,9 (7-18) de triples y el 63,3 (19-30) de personales, comparados al 36,5; 27,8 (5-18) y 74,1 (20-27), respectivamente, de los Lakers.

Esta vez la estrella de los Lakers kobe, que estrenaba nuevas zapatillas y el ala-pívot español, extensión de contrato por tres temporadas más, no pudieron hacer nada ante un rival que jugó siempre mejor en ataque y en defensa para además poner el espectáculo con James.

Bryant quiso ser una vez más el héroe de los campeones de liga, pero los 35 puntos, nueve rebotes, ocho asistencias y dos recuperaciones de balón que aportó no le sirvieron para ser también "salvador", porque el resto del equipo no estuvo por la labor de acompañarle en el esfuerzo individual que realizó.

El alero Ron Artest, que fue eliminado por faltas personales, aportó 13 puntos, mientras que Gasol llego a los 11 con seis rebotes para ser junto a Bryant los tres jugadores de los Lakers con dobles dígitos. Gasol, esta vez no pudo ser el lugarteniente perfecto para Bryant, al anotar sólo 4 de 11 tiros de campo y 3 de 4 desde la línea de personal, para dar una asistencia en 39 minutos que estuvo en la pista.

Los Ángeles Lakers 8 7 : (19+23+17+28): Fisher (7), Bryant (35), Bynum (4), Artest (13), Gasol (11) -cinco inicial-, Brown (3), Vujacic (5), Odom (6), Farmar (-) y Powell (3).

Cleveland Cavaliers 102 : ( 23+28+25+26); Williams (28), Parker (4), O'Neal (11), James (26), Hickson (2) -cinco inicial-, Gibson (-), Varejao (9), Moon (13), Ilgauskas (2), West (7), Jawad Williams (-) y Jackson (-).

Texto:20minutos

Foto:REUTERS

martes, 22 de diciembre de 2009

El Mesias el mejor

Leo Messi despidió el año 2009 con un nuevo galardón, el 'FIFA World Player', después de conseguir a nivel personal el 'Balón de Oro 2009', el pasado 6 de diciembre, y los seis títulos que ha disputado con su equipo a nivel colectivo (Liga, Liga de Campeones, Copa del Rey, Supercopa de España y de Europa y Mundialito de Clubes).

El argentino (1.073 puntos), que recibió el premio en la ceremonia celebrada esta noche en el "Kongresshaus" de Zúrich, superó en las votaciones al portugués Cristiano Ronaldo (352), Xavi Hernández (196 ), Kaká (190) y Andrés Iniesta (134).


Además de dicho galardón, el de mejor jugador del Mundialito de Clubes y el concedido por la revista 'France Football' a comienzos de este mes, el delantero del FC Barcelona también recibió el 'Onze d'Or'.

"Ha sido un año maravilloso para el Barça, para mis compañeros y para mí", manifestó Messi, muy contento.

El jugador salió elegido al superar la votación de los capitanes y seleccionadores de los combinados nacionales de todo el mundo, algo que le ilusiona especialmente. "Este premio es especial, porque me lo han dado compañeros de otros equipos y selecciones", señaló.

Messi, que había terminado en la segunda posición en los años 2007 y 2008, sucede en el título al ahora madridista Cristiano Ronaldo, que lo logró en 2008 militando en el Manchester United.

4 españoles y 4 del Barça en el mejor equipo

Al margen del premio concedido a Messi, en la ceremonia se determinó el mejor equipo de todo el año, en el que se encuentran un total de cuatro futbolistas españoles: Iker Casillas, Xavi Hernández, Andrés Iniesta y Fernando Torres


El once mundial de la FIFA y la FIFPro fue elegido por más de 50.000 futbolistas profesionales de todo el mundo, que han votado al que consideran el mejor jugador en cada posición y se completa con los siguientes nombres: Alves (Barcelona), John Terry (Chelsea), Vidic (Manchester United), Evra (Manchester United), Steven Gerrard (Liverpool), Messi (Barcelona) y Cristiano Ronaldo (Real Madrid).

Texto:20MINUTOS.ES.

Foto:EFE


Baño de multitudes y empate

El Barça cerró el 2009, año en el que se ha coronado como el mejor equipo de la historia del fútbol tras conquistar los seis títulos en juego, con un empate en un amistoso frente al Kazma Sporting kuwaití (1-1), en el que destacó el retorno a los terrenos de juego del argentino Gabi Milito.

El encuentro para el equipo de Pep Guardiola, que respondía a criterios puramente económicos a favor de los culés (en torno a 2 millones de euros), se presentaba como un acontecimiento inmejorable para un público entregado y frente a un rival de perfil medio-bajo, ante el que actuaron jugadores no habituales.
El Barça cerró el 2009, año en el que se ha coronado como el mejor equipo de la historia del fútbol tras conquistar los seis títulos en juego, con un empate en un amistoso frente al Kazma Sporting kuwaití (1-1), en el que destacó el retorno a los terrenos de juego del argentino Gabi Milito.

El encuentro para el equipo de Pep Guardiola, que respondía a criterios puramente económicos a favor de los culés (en torno a 2 millones de euros), se presentaba como un acontecimiento inmejorable para un público entregado y frente a un rival de perfil medio-bajo, ante el que actuaron jugadores no habituales.
El único tanto lo marcó Bojan en el minuto 80, después de recibir un pase de Touré Yayá y de superar al meta Al Fathly con un tiro en vaselina que lo tocó Maxwell cuando el balón parecía haber superado la línea de gol.

En una de las escasas aproximaciones de los locales al área del Barça, Abdullah Al Dafiri marcó el empate en el minuto 92 en medio de la fiesta de la grada kuwaití. Los azulgrana inician las vacaciones hasta el próximo 28 de diciembre, aunque alguno de los componentes de la plantilla azulgrana participarán mañana en el amistoso Cataluña-Argentina.

Kazma Sporting Club 1 : Kankoune; Nasser, Khaled, Sandro, Ali, Onezy, Nawaf, Al Dafiri, Faraj, Tarek y Al-Fahd. En la segunda parte también jugaron, entre otros, Al Fadli, Al Abadd, Sultan, Naser Safi, Al Kanderi y Mauricio Salas.

FC Barcelona 1 : Pinto; Marc Bartra, Milito (Oriol Romeu, m.62), Márquez, Maxwell; Chigrinskiy, Jonathan Dos Santos, Thiago Alcántara, Víctor Vázquez (Fontás, m.55), Bojan y Jeffren Suárez (Touré Yayá, m.49)

Goles: 0-1, m. 80: Bojan. 1-1, m.90+2: Abdullah al Dafiri.

domingo, 20 de diciembre de 2009

Lideres en solitario

El Regal FC Barcelona, primer clasificado, consiguió derrotar (84-72) al CB Murcia, colista, y se asienta como líder en solitario de la Liga ACB tras la disputa de la decimotercera jornada de competición en la que el Real Madrid cayó (80-62) frente al Caja Laboral en lo que fuera el partido más atractivo.

Los de Xavi Pascual, que siguen mostrándose intratables, comenzaron el choque algo dormidos y aprovechando los 'chispazos' de jugadores como Fran Vázquez, que cuajó su mejor actuación de la temporada, Ricky Rubio, sublime en la dirección de juego, y de Juan Carlos Navarro, que se bastó de un buen tercer cuarto para sentenciar a los pimentoneros.

En el segundo cuarto, un parcial de 4-15 para los de Eduard Gil colocó a los murcianos por delante (31-32) gracias en parte al juego del brasileño Paulo Prestes en la pintura y de Milos Vujanic en el lanzamiento de 6,25.

Regal FC Barcelona 84 (27+10+32+15): Rubio (9), Navarro (14), Ndong (8), Morris (9), Mickeal (4) – cinco inicial – Basile (-), Trias (-), Lakovic 8-), Vázquez (18), Sada (2), Lorbek (9), Grimau (11)

CB Murcia 72 (17+15+23+17): Robles (3), Moss (7), Delininkaitis (13), Prestes (10), Powell (5) – cinco inicial – Sánchez (-), Faverani (2), Vujanic (26), Moncasi (-), Scepanovic (6)

Pero el Barcelona demostró el porqué de su liderato y, gracias al acierto de Fran Vázquez, que consiguió 18 puntos, Ricky Rubio, que repartió ocho asistencias, y Juan Carlos Navarro, que terminó con 14 tantos, los catalanes comenzaron a poner 'tierra de por medio' hasta distanciarse por más de diez puntos.

Ya en el último cuarto, el conjunto azulgrana se limitó a mantener una renta que les da lo que significa su decimoctava victoria consecutiva entre la competición doméstica y la Euroliga donde cuenta sus ocho partidos con victorias. Además, Xavi Pascual consigue su récord de 10 victorias consecutivas en ACB.

Texto:Europa press

Foto:EFE/Andreu Dalmau



Campeones de mundo

El Barcelona se convirtió en el mejor club del mundo tras ganar en una sufrida final al Estudiantes (2-1) logrando así su sexto título en un año mágico y que posiblemente sea irrepetible por ningún club del mundo.

Tras la Copa del Rey, la Liga, la Champions League, las Supercopas de España y Europa, ahora se suma el Mundial de clubes, una competición hasta ahora maldita para los azulgrana.

Y es que el llamado Mundialito (y su predecesora, la Intercontinental) no había sido un torneo propicio para el Barça. En las tres ocasiones en las que ha participado era el claro favorito a alzarse con la victoria, pero en las dos anteriores se había estrellado. Primero fue el Sao Paulo del gran Raí ante el 'Dream Team' de Cruyff en 1992 y después el Internacional de Porto Alegre en 2006 con el Barça de Rijkaard y Ronaldinho. A dos minutos del final parecía que el sorprendente verdugo iba a ser Estudiantes de la Plata, pero esta vez estaba Pedrito, Don Pedro, para evitarlo. Y después Messi para rematarlo.

El Barça estaba irreconocible en la primera parte. Con menos posesión de lo que en ellos es habitual y con un juego lento y excesivamente parsimonioso, los 'culés' no se acercaron con peligro en 45 minutos de juego y ni siquiera chutaron a portería (ni fuera de ella), algo insólito en el Barça de Guardiola.

Los argentinos dominaban a la perfección el ritmo del partido y su presión asfixiaba el juego azulgrana. Con Messi en paradero desconocido, Xavi echaba de menos a su socio en el mediocampo, Andrés Iniesta, pues el resto de compañeros estaban totalmente desaparecidos.

Estudiantes controlaba pero parecía no crear peligro. Sin embargo, un centro perfecto desde la banda izquierda lo remató al fondo de la red Boselli, poniendo el 1-0 ante la sorpresa de los 'culés', que seguían sin reaccionar.

El panorama cambió radicalmente en la segunda mitad. La entrada al campo de Pedro reactivó al Barça, que avanzó su posición 20 metros y comenzó el asedio al equipo argentino en busca del empate.

Thierry Henry, desaparecido totalmente en los primeros 45 minutos, fue una pesadilla para Clemente Rodríguez en la segunda parte y las ocasiones se empezaron a suceder para los azulgrana.

Pedro estuvo a punto de marcar en un par de ocasiones, pero la zaga argentina demostró en todo momento su saber estar y su veteranía. El Barça era un querer y no poder, con dominio absoluto pero sin recursos.

Todo parecía perdido para el conjunto azulgrana, pero el Barça volvió a recurrir a la heróica para salvar los muebles en el último momento. Al igual que ocurrió en Stamford Bridge con aquel mítico gol de Iniesta, otra vez la insistencia y el juego de ataque volvió a encontrar su recompensa. A dos minutos del final de tiempo reglamentario, un balón colgado al área lo tocaba Piqué de cabeza y el balón le llegaba a Pedro, que otra vez iba a ser el salvador del equipo rematando a gol. Euforia 'culé' y a la prórroga.

En el tiempo añadido no hubo partido. La superioridad azulgrana era manifiesta y los argentinos se aferraban a la posibilidad de los penaltis, algo remota viendo la diferencia de juego entre ambos.

Al final, la avalancha de juego y dominio 'culé' vio su recompensa en el gol de Messi, aprovechando un gran pase de Alves desde la banda y dando al Barça su sexto título de 2009. Año perfecto para el Barcelona, el mejor club del mundo de manera totalmente merecida gracias a la apuesta por el buen fútbol y el juego de ataque hecha por su entrenador, Pep Guardiola.

Estudiantes 1 :
Albil; Rodríguez, Cellay, Desábato, Ré (Rojo, min.90+1); Díaz, Benítez (Sánchez, min.76), Verón, Braña; Enzo Pérez (Máxi Núñez, min.79) y Boselli.

FC Barcelona 2 : Valdés; Alves, Puyol, Piqué, Abidal; Xavi, Busquets (Touré Yaya, min.79), Keita (Pedro, min.46); Messi, Ibra y Henry (Jeffrén, min.82).

Goles:
1-0, min.37: Boselli. 1-1, min.89: Pedro. 1-2, min. 110; Messi. 1-2, min.110: Messi

Texto:20minutos.es

Foto:FCBarcelona

Memorable victoria

La Unión Baloncesto La Palma dio la sorpresa de la jornada al batir al Básket CAI Zaragoza en el Insular de Miraflores por 87-82. El grupo dirigido por Rafa Sanz volvió a apelar a la heroica forzando una increíble prórroga merced a una canasta sobre la bocina de Josemi García y ganando merced a un parcial de 11-3 en los dos últimos minutos del tiempo extra.

El conjunto local salió a por todas desde el comienzo y con una intensa defensa y mucho acierto en la pintura, con Padgett y Palacios como principales estiletes, consiguió tomar sus primeras rentas en el marcador (7-2 y 11-4). En ese instante, sin embargo, apareció la figura del base visitante, Edu Sánchez, quien con tres triples consecutivos le dio el mando a su equipo en el marcador (13-16, minuto nueve).

Una reacción final de los insulares, con canasta de Sebas Arrocha y triple de Juan Diego Palacios (10 puntos al descanso), pese a todo, le devolvía la delantera en el partido al término del primer acto (18-16).

La defensa zonal 2-3 ordenada por el técnico del cuadro palmero pareció dar resultados tanto al final del primer cuarto como en el inicio del segundo, aunque poco a poco empezaron a llegar las canastas desde el perímetro de los aragoneses, lo cual propició que volvieran a voltear el marcador a tres minutos del descanso (27-30, minuto 17). Un tiempo muerto solicitado por Rafa Sanz, pese a todo, pudo cortar la sangría, alcanzando el intermedio con las posibilidades de triunfo intactas (32-34).

La Palma, apoyándose fundamentalmente en David Padgett, salió con la máxima intensidad tras el intermedio, recuperando no sólo el liderato del encuentro sino incluso logrando una máxima ventaja de ocho puntos (49-41). Parecía muerto el conjunto visitante, pero éste tiró de casta y calidad y merced a un parcial final de 2-17 acabó el tercer cuarto con una renta de siete puntos (51-58).

Los anfitriones, sin embargo, no tiraron la toalla y, cuando menos, supieron mantenerse en el encuentro al inicio del último acto (64-70, minuto 36). Los puntos de Padgett, además, ayudaron a renovar las ilusiones en el tramo definitivo del encuentro, al que entraron con sólo dos puntos de desventaja (73-75). El CAI marró entonces varias opciones para sentenciar, todo lo contrario que La Palma, que con una canasta de Josemi García tras rebote ofensivo sobre la bocina logró forzar la prórroga (75-75).

Las cosas no comenzaron demasiado bien en el tiempo extra, sobre todo para los locales, que en dos minutos sólo fueron capaces de anotar un punto. Pero como ocurriera en el final del choque, los zaragozanos no fueron capaces de aprovechar esta circunstancia (76-79, minuto 43), encontrándose con otra increíble remontada de la mano de Padgett, Palacios y García, que completaron un parcial de 11-3 que les costó la derrota por 87-82.

Ahora, a por el Tarragona.

UB La Palma 87 :(18+14+19+24+12). David Padgett (24), Juan Diego Palacios (19), Joaquín Bonhome (5), Josemi García (14) y Raúl Mena (2) -inicial-, Luis Felipe Gruber (5), Sergio Olmos (4), Matías Ibarra (5), Jan Orfila (4) y Sebas Arrocha (5).

CAI Zaragoza 82 : (16+18+24+17+7). Chinemelu Elonu (8), Darren Philip (8), David Barlow (15), Paolo Quinteros (14) y Edu Sánchez (17) -inicial-, Nacho Martín (5), Pedro Rivero (11), Jaime Lloreda (4) y Francisco Robles (-).

Texto:JORNADA, S/C de La Palma

FOTO: César Borja / UB LA PALMA

Poco a poco

Este Tenerife Rural sí que vale. Ya no sólo defiende. Ya corre y anota, y eso lo hace un equipo muy competitivo. En Melilla jugó a un buen nivel y a punto estuvo de ganar al líder y ayer, al tercer clasificado, el Sant Josep, le ganó jugando un gran partido, quizás el mejor que se ha visto en el pabellón insular Santiago Martín a lo largo de la presente campaña.

El club insular completa así una semana casi perfecta. El consejo se reforzó y el equipo ganó. Ahora sólo falta que exista un mayor apoyo en las gradas para que este grupo vuelva a estar en la zona que realmente le corresponde.

En lo que se refiere al partido, hay que destacar la aportación de todo el grupo desde los primeros instantes, unos con más fortuna que otros, pero siempre con una intensidad defensiva ante un rival muy complicado.

Lou Roe, que anotó 27 puntos, capturó 14 rebotes y terminó con 42 de valoración, lideró a su equipo, pero sería injusto nombrarlo sólo a él, porque el Tenerife Rural ganó por el esfuerzo y aportación ofensiva de todos.

Ese 7-2 de entrada dijo mucho porque el conjunto de Iván Déniz salió dispuesto a todo, con una intensidad defensiva importante y con un juego muy rápido. No logró escaparse en el marcador con mayor diferencia, pero hizo un trabajo de desgaste. Los balones iban hacia Roe, que cargaba a sus rivales con faltas. Primero fue Drevo, con dos, y luego Ortega, con otras dos.

El San Josep no se escondió y logró mantenerse en el choque. Del empate a diez puntos pasó al de 19 y luego a 21 con el que terminó el primer cuarto. En este primer periodo, lo más importante en el Tenerife fueron las faltas provocadas al rival. Los insulares no estaban haciéndolo mal, pero el conjunto catalán estaba muy acertado.

El segundo cuarto fue muy diferente y los dos equipos jugaron por rachas. Primero fue el Tenerife Rural el que se fue de cinco puntos (26-21), pero luego empató el conjunto visitante (26-26). Un parcial de 10-0 para los de Iván Déniz puso el marcador en un 36-26, con dos triples consecutivos de Lou Roe -15 puntos anotados-, con lo que el conjunto blanquiazul alcanzó su máxima diferencia hasta el momento.

El Tenerife Rural estaba defendiendo a un nivel muy alto, pero lo importante, a diferencia de anteriores partidos, es que estaba corriendo y anotando.

El turno llegó para el Sant Josep que acortó peligrosamente las diferencias y, tras ir perdiendo por doce puntos en el minuto 19 (39-28), en un minuto se puso a tres puntos (39-36) para llegar al descanso con un 41-36.

El inicio del tercer cuarto del Tenerife Rural fue espectacular y decisivo. Un 9-0 que puso al Tenerife Rural con un claro 50-36. En esta fase del choque Adrian Boccia fue clave. Aprovechó su altura y ante un defensor más pequeño (Sabat) para jugar en el poste medio y hacer mucho daño bajo canasta. Anotó seis puntos en dos minutos y creó peligro por otro lado del campo. Ya el Sant Josep no sabía donde fortalecer su defensa, ya que por un lado estaba Iván Rodríguez o Sergio Pérez, por otro Fergerson y por otro Lou Roe. Ya el rival estaba tocado y el Tenerife jugó con ventajas que superaban los diez puntos de diferencia. Llegó a estar a 16 (54-38) y terminó el tercero con 13 (69-56).

Mantener el mismo nivel en el último cuarto se presumía difícil y más ante un adversario que contaba con un buen juego exterior, aunque con el único problema de Middleton, que estuvo bien sujeto.

Déniz puso a Fergerson de base y el escolta supo sacar su experiencia: aguantar siempre el balón, provocar faltas y anotar desde el tiro libre. Del 82-77 se pasó a un 87-80 del minuto final. Alegría, por tanto, de un equipo que se mereció la victoria.

Tenerife Rural 96 :(21+20+28+27). Eric Sánchez (4), Fergerson (17), Julio González (7), Lou Roe (27), Fiorotto (-) -inicial-, Boccia (14), Tony Hernández (-), Sergio Pérez (13), Iván Rodríguez (10) y Ayón (4).

Sant Josep 84 :(21+15+20+28). Sabat (18), Drevó (13), Devries (21), Feliú (3), Middleton (9) -inicial-, Ortega (2), Jiménez (-), Nikkila (4) y david Navarro (14).

Texto:J. SOTOMAYOR, S/C de Tfe.

Foto:tenerifebaloncesto

domingo, 13 de diciembre de 2009

Fin a la racha

El base Deron Williams surgió en los momentos decisivos del cuarto periodo para ser el líder perfecto que los Jazz de Utah tuvieron en la victoria de 102-94 frente a Los Ángeles Lakers, que vieron rota su racha de 11 triunfos consecutivos.

Williams anotó ocho puntos consecutivos al comienzo del cuarto periodo que iban a permitir a los Jazz ponerse con un parcial de 17 tantos de ventaja (88-71) que iban a ser decisivos. El base franquicia de los Jazz, que lograron el segundo triunfo consecutivo, aportó un doble-doble de 21 puntos con 11 asistencias, cuatro rebotes y dos recuperaciones de balón para encabezar una lista de seis jugadores que tuvieron dobles dígitos.

Kobe Bryant, lesionado

Pero si el ataque balanceado fue decisivo con Williams de líder, la defensa sobre el escolta Kobe Bryant, la estrella de los Lakers, también se convirtió en factor ganador para los Jazz, después de limitar a la estrella de los campeones de liga a sólo 16 puntos.

Bryant, que la pasada noche ante los Timberwolves de Minnesota sufrió al fractura del dedo índice de la mano derecha, sintió los efectos 24 horas después, al anotar sólo 7 de 24 tiros de campo, incluidos 1-9 triples, e hizo sólo un tiro de personal, que anotó.

El escolta estrella de los Lakers también aportó seis rebotes con cinco asistencias y recuperó un balón, pero esta vez no pudo hacer el milagro de salvar a su equipo para mantener la racha triunfal al concluir el cuarto periodo con sólo ocho aciertos en 26 tiros de campo.

Nueva exhibición de Gasol

Tampoco el gran partido individual que protagonizó Gasol al conseguir por segunda noche consecutiva un doble-doble y empatar la mejor marca como profesional de 20 rebotes impidió que perdiese el invicto que tenía desde que jugó su primer partido esta temporada después de perderse los 11 primeros por lesión

Gasol, que consiguió el sexto doble-doble en 11 partidos que lleva disputados y el tercero consecutivo, anotó 16 puntos, mientras que repitió exhibición bajo los aros con 11 rebotes defensivos y nueve ofensivos, comparados a los 12 y 8, respectivamente, de la noche anterior cuando estableció la mejor marca como profesional.

La gran labor de Gasol, que se impuso a Boozer en el duelo individual, no se vio compensada con la victoria porque Bryant no surgió con los puntos decisivos y los 16 de Ron Artest y 15 de Derek Fisher sólo sirvieron para hacer estadísticas.

Texto:EFE

Foto:REUTERS

Hasta de penalty injusto

Un discutido penalti transformado por Zlatan Ibrahimovic le dio la victoria al Barça ante el Espanyol (1-0), en un encuentro en el que los de Pep Guardiola olvidaron su mejor versión y perdieron sus automatismos que tan buenos resultados les ha dado.

El Barça ofreció su peor versión en muchas jornadas. No sufrió en exceso, pero sí se vio superado durante muchos minutos por su rival, un voluntarioso Espanyol, que llegó como tantas otras veces como víctima propiciatoria.

Ganaron los azulgrana gracias a un discutido penalti transformado por Ibrahimovic que marcó su undécimo gol en la Liga y que sirve al Barça para continuar al frente de la clasificación en su último partido de 2009 en el Camp Nou.

El exceso de encuentros en pocas fechas pasó factura a los azulgrana. Eso y el hecho de que el Barça cambió su manera de jugar y le dio más protagonismo a los apoyos en la medular de Ibrahimovic.

De hecho, el sueco jugó muchos minutos en el centro del campo, buscando la posibilidad de crear espacios entre los dos centrales blanquiazules.

Sin Messi, lesionado, el Barça buscó la proyección por la banda de Pedro, que estuvo muy incisivo y dispuso de la mejor ocasión del primer tiempo cuando robó un balón a Chica y remató por encima del travesaño de Kameni (m.14).

Como es habitual en los últimos derbis en el Camp Nou, el Espanyol se resguardó en exceso, sobre todo en la primera mitad. Al equipo de Pochettino la posesión del balón apenas le duraba y el Barça intentó arrollar al rival.

Pero le costó entrar en materia a los de Guardiola, demasiado impreciso y con un pase de más en muchas ocasiones. Además Kameni, que suele firmar buenas actuaciones en el Camp Nou, estuvo muy atento en un par de acciones de reflejos en los primeros minutos.

El primer aviso del partido lo dio el Espanyol, con una acción de Iván Alonso, y los blanquiazules remataron otra vez más, en el 15, en un gran disparo de Verdú que salvó Valdés. Eso fue todo lo que ofreció en el primer tiempo.

El Barça construyó no desde Xavi e Iniesta, como es natural, sino a partir de Ibrahimovic y sus desmarques, con lo que el juego de los azulgrana ofrecía otros automatismos.

De hecho el sueco asistió en dos ocasiones que pudieron ser gol. Una a Henry (m.17) y otra a Maxwell (m.36), que hoy sustituyó a Abidal en el lateral izquierdo.

Sin embargo, el primer gol llegó en un penalti transformado por el nueve del Barça en el minuto 38, tras una acción dentro del área de Baena sobre Xavi que fue muy protestada por los blanquiazules.

Cambió el panorama en el segundo tiempo con la entrada de Javi Márquez y de Callejón por parte del Espanyol. Salvo unos primeros minutos en los que Dani Alves (m.50 y m.53) aprovechó los espacios por su banda, los blanquiazules se hicieron con el control de la situación.

Con mucho desparpajo y las ideas muy claras, los de Pochettino, sin llegar a crear ocasiones de gol, empezaron a creer en sí mismos y crearon confusión al Barça, que no acababa de funciona y se mostró demasiado errático.

Los azulgrana, que no tenían frescura física, recuperó sus opciones con la entrada de Keita como centrocampista. A partir de entonces, sin brillo, el Barça al menos dejó de sufrir, frente a un rival que apuntaba, pero no llegó a disparar en toda la segunda mitad.

Entró Bojan por Ibrahimovic, en el cuarto de hora final, pero los azulgrana no funcionaban en ataque y sólo tuvieron una ocasión clara que salvó Roncaglia bajo palos en el minuto 90. Al Espanyol le queda el consuelo de haber plantado cara al todopoderoso Barça. Los locales apenas tendrán tiempo de reflexión, mañana viajan a Abu Dhabi para jugar el Mundial de Clubes.

Barcelona 1 : Valdés; Alves, Piqué, Puyol, Maxwell; Touré (Busquets, m. 85), Xavi, Iniesta; Pedro (Keita, m. 60), Ibrahimovic (Bojan, m. 76) y Henry.

Espanyol 0 : Kameni; Roncaglia, Pareja, Víctor Ruiz, Chica; Forlín, Baena (Javi Márquez, m. 46); Luis García, Verdú (Callejón, m. 46), Corominas (Ben Sahar, m. 76) e Iván Alonso.

Texto:EFE

Foto: EFE/TONI ALBIR

jueves, 3 de diciembre de 2009

Ganador del Balon de oro 2009




Lionel Messi confirma que de Rosario salen grandes futbolistas. Allí nació él, en junio de 1987, pero con el tiempo habrá quienes discutan que se le pueda considerar rosarino. Dentro de cuatro años habrá vivido en Barcelona tanto tiempo como en su ciudad natal. A Barcelona llegó siendo un niño de 13 años, por una iniciativa de sus padres, que estaban seguros de su talento pero, a la vez, creían que necesitaba ayuda médica para culminar su desarrollo. Llegaron a un acuerdo con el Barcelona para que lo acogiera. La suya pudo ser una historia más de niños prodigio que entran en la estructura de un club grande y luego se malogran. En su caso parece que resultó providencial un informe favorable de Rexach, que solo necesitó verle jugar diez minutos para darse cuenta que en aquel chavalín de los filiales barcelonistas brillaban todos los signos de los elegidos. No tardarían en deslumbrar de forma cegadora. A los 17 años debutó en el primer equipo de Barcelona. Cinco años después le acaban de conceder el Balón de Oro al mejor futbolista europeo (o que juega en Europa), una distinción votada por periodistas de todos los países. No sería ninguna sorpresa que este mes la FIFA lo elija mejor jugador del mundo, trofeo que deciden los seleccionadores nacionales. A sus 22 años Messi ha llegado a una cima, pero quizá no la más alta. Él, con toda la vida deportiva por delante, puede aspirar a cotas mayores, como la de ser un futbolista de época, a la altura de los más grandes o tal vez por encima de ellos.

Tiene unas condiciones fantásticas. Es muy rápido, muy bueno técnicamente y muy imaginativo. Arranca con la velocidad de un rayo y gira vertiginosamente; mejor que una estrella del ballet, porque es capaz de interrumpir en seco el giro y reanudarlo en sentido contrario. Con estas cualidades y una inventiva prodigiosa es capaz de salir de las encerronas más férreas, como un Houdini del balón, pero a velocidad supersónica. Y lo hace con la pelota pegada al pie, con microtoques que apenas la separan unos centímetros de la bota.

Siendo portentosas sus otras cualidades, ésta es particularmente prodigiosa. Hace algún tiempo Alfredo Di Stéfano -sólo dos veces balón de oro porque el reglamento del trofeo impidió durante años que un futbolista pudiera repetir- ponía su lupa de experto en esa cualidad de Messi. "Lo estoy estudiando", decía con admiración. Llegará a explicarlo, pero también a la conclusión de que esa habilidad es intransferible.

Si Messi es ya fantástico con el balón en los pies, ahora debe crecer en su relación con el equipo, al que puede ayudar más de lo muchísimo que ya lo hace. Le queda, por ejemplo, mejorar en el aspecto táctico. Y progresar de cara a la portería. Ya lo está haciendo. Marca cada vez más goles. Pero aún no ha desarrollado del todo su capacidad finalizadora. No es sólo cuestión de instinto, sino también de maestría. Tira bien, aunque no muy fuerte. Muchos de sus goles los consigue porque se planta irresistiblemente ante el portero. Pero le queda explotar otras alternativas, como el disparo a distancia.

Con sus 1,69 metros quizá no llegue nunca a ser un gran cabeceador, pero ya ha demostrado que puede saltar para marcar, como en la pasada final de la Copa de Europa. En fin, se le adivinan más motivos para progresar que para estancarse. La pérdida de su condición física privilegiada -esa fulminante salida- y el agotamiento de su imaginación son los peligros que le acechan. De momento, sólo hipotéticos, como también lo es la falta de ambición, ya provenga del acomodamiento o se la imponga la dureza de los rivales, ante la que hasta ahora se ha comportado como un estoico, otra virtud más.

MESSI O MARADONA. Ese rasgo plano de su personalidad, que se traduce en una expresión de esfinge sonriente, contrasta netamente con la desmesura, a menudo estrafalaria, que ha sido norma de conducta de quien es, por ahora, su rival ante la Historia, y, por desgracia, su seleccionador: Diego Armando Maradona. ¿Llegará a superarle? ¿O tal vez le ha superado ya? Los dos son zurdos, los dos imaginativos, los dos con inventiva genial. Maradona tenía tal vez mejor toque y mejor desplazamiento de balón en largo. Messi es mucho más rápido y con mejor físico.

Se puede comparar -ya se ha hecho muchas veces- sus dos goles supremos, el que Maradona marcó a Inglaterra en México en las semifinales de un Mundial y el que Messi hizo al Getafe en el Camp Nou en la Liga. En el gol de Maradona sólo hay un momento de apuro, al inicio de la jugada, cuando recibe el balón de Enrique en el centro del campo. Le entran entonces dos contrarios y se los quita de encima con un amago y un giro perfecto mientras pisa el balón. El resto de la jugada es un ejercicio de conducción del balón, con más seguridad que velocidad, que no la exige la colocación de los jugadores ingleses, que están dispuestos sobre el campo como fichas en un damero. Maradona las va comiendo de una en una, acelerando progresivamente hasta que se planta ante Shilton, al que desborda hacia afuera para tirar luego a puerta vacía.

El gol de Messi ante el Getafe se inicia con mucha más dificultad. No sólo parte de una posición imposible en la banda, donde le cierran tres contrarios, sino que éstos le oponen una resistencia sañuda cuando logra abrir camino e inicia la escapada. Pero se va pese las tarascadas que le lanzan y corre a toda velocidad hacia la portería. Frente al área le espera, bien situada, la defensa, pero la supera en un slalom vertiginoso, tras el que se planta ante el portero, al que dribla hacia la derecha para marcar a puerta vacía.

La comparación no es homogénea, reconozcámoslo. No es lo mismo tener enfrente a una selección nacional que a un buen equipo de Primera (el Getafe entonces lo era), pero me gustaría llamar la atención sobre un detalle. Cuando, tras desbordar a Shilton, Maradona toca el balón para mandarlo a puerta, llega tan forzado que, tras el toque, rueda como una pelota. Messi, en cambio, toca suelo con la rodilla y se incorpora de inmediato. Se mantiene dueño de la situación no sólo de principio a fin, sino también después del fin.

Maradona llevó hace poco tiempo a Messi a Rosario con la selección Argentina. La albiceleste perdió y Messi no jugó bien. Dicen que, entre otras cosas, porque no jugó en su sitio. Los rosarinos, que sólo conocen a Messi a través de la televisión, se quedaron decepcionados. Quizá muchos de ellos comparten el descreimiento que parece proyectar sobre el barcelonista el descomunal egoísmo del actual seleccionador. Da la sensación que esa suspicacia de los suyos ha podido herir a Messi y eso explicaría su crisis de los últimos partidos. Pero probablemente se rehaga y vuelva a ser pronto el futbolista deslumbrante con gesto de esfinge feliz.

A medio gas y al tun-tun

El Barcelona se afianza en el liderato de la clasificación de Primera División al vencer por 0-2 al Xerez gracias a los goles de Thierry Henry y Zlatan Ibrahimovic, logrados al inicio y al final del segundo tiempo para deshacerse del Xerez, que, no obstante, le plantó cara al campeón y mantuvo vivo el partido hasta el final.

El Xerez aguantó los primeros cuarenta y cinco minutos al todopoderoso Barcelona, que, ahogado en la presión defensiva del equipo xerecista, abusó de una posesión lenta de balón y de falta de profundidad.

Los dos puntas del Xerez, Bermejo y Carlos Calvo, presionaban la salida del balón de los centrales azulgranas, Márquez y Chygrynskiy, mientras que Sidi Keita y Bergantiños se encargaban de Xavi y Seydou Keita, respectivamente. El Barça trataba de salir de la presión con balones a la espalda, sobre todo a Bojan, aunque la mayoría de las veces los jugadores azulgranas caían en fuera de juego.

Dio primero el Xerez por medio de Orellana, pero su remate lo despejó un defensa azulgrana. Respondió el Barça con un centro de Alves al primer palo, que recogió Bojan, se la dejó a Pedro y finalmente apareció un zaguero azulino para despejar.

Tres minutos después fue Keita quien tuvo una clarísima ocasión después de una gran jugada de Bojan, que le dio el pase de la muerte al africano, más éste no llegó a contactar con el balón.

Nada más salir de los vestuarios, el Xerez recibió un jarro de agua fría. En el primer minuto de la segunda mitad, un dos para dos entre Keita y Maxwell fue finalizado de cabeza por Thierry Henry para adelantar al Barça en el marcador.

El nuevo Balón de Oro, Leo Messi, salió en el minuto 54 y, aunque no se le vio mucho, dejó destellos de su clase justo cuando el reloj marcaba el minuto noventa de partido. Remató al poste y poco después asistió a Ibrahimovic, que puso la sentencia.

Xerez 0 :Renan, Bergantiños, Leandro, Francis, Mario Bermejo, Víctor Sánchez (Armenteros, m. 73), Orellana, Carlos Calvo (Antoñito, m. 56), Casado, Aythami y Keita.

Barcelona 2 : Valdés, Dani Alves, Márquez, Xavi, Bojan (Ibrahimovic, m. 66), Henry (Iniesta, m. 82), Keita, Pedro (Messi, m. 54), Maxwell, Chygrynskiy y Yayá Toure.

Texto:EFE

Foto:diariodejerez.es

martes, 1 de diciembre de 2009

Uno de los clásicos más igualados

Un semana le ha durado el liderato al Real Madrid. Su eterno rival, el Barcelona, se lo arrebató ayer tarde en el Camp Nou gracias a un golazo del sueco Zlatan Ibrahimovic al inicio de la segunda mitad, en uno de los clásicos más igualados de los últimos años.

El Barça tuvo que pelear la victoria hasta el último suspiro. Primero, enfrentándose a un oponente que incomodó mucho su juego, sobre todo en el primer tiempo. Y después, sobreponiéndose a la adversidad de jugar con un hombre menos durante la última media hora de partido, justo cuando todo se le había puesto de cara al adelantarse en el marcador.

Con Lionel Messi y Cristiano Ronal-do, pero sin Ibra, arrancó el partido. No hubo minutos de tanteo. Ambos equipos fueron a buscarse muy arriba desde el inicio, para luego atacarse cada uno con su estilo. El Barça elaborando su fútbol; el Madrid, con un juego más primario y directo.

Fue un pulso de veinte minutos por controlar el centro del campo. Un primer envite de fútbol eléctrico, con muchos más errores que aciertos, que terminó cuando llegó la primera ocasión clara del partido: un mano a mano de Cristiano con Valdés que el meta azulgrana desvió con la punta de una bota.

El Real Madrid había enseñado los dientes al Barça en su propia casa y el conjunto catalán pareció desconcertado. Quiso darle réplica, pero no encontraba la clarividencia de Xavi ni tampoco el desborde de Messi, permanentemente vigilado por Arbeloa o Albiol.

Los de Pellegrini ahogaron al Barça en 30 metros y el conjunto azulgrana no supo serenar su juego. Ansioso, precipitado, enmarañado, cayó de cuatro patitas en la trampa blanca. Lass y Xabi Alonso trazaban la línea y el equipo de Guardiola jugó durante muchos minutos alejado de los dominios de Casillas.

El Madrid, amenazante, tuvo otra clara ocasión por mediación de Marcelo, pero Puyol se interpuso cuando el volante brasileño se disponía a fusilar a Valdés.

Sólo al final de la primera parte, cuando Iniesta apareció por la izquierda para suplir las carencias de un desangelado Henry, el Barça puso tímidamente a prueba a Iker.

Parecía difícil que el Madrid aguantará ese ritmo en la reanudación. Y, efectivamente, fue perdiendo fuelle desde el inicio de la segunda parte. Aún así, pudo adelantarse en una contra que acabó en las botas de Higuaín y que de nuevo abortó un bravo Puyol.

Instantes antes, Ibrahimovic había entrado en escena sustituyendo a Henry. En la primera que tuvo, el sueco fusiló a Casillas al conectar de volea un centro por la derecha de Alves (1-0).

Faltaban treinta y cinco minutos para el final y el Barça empezaba a convertir el partido en un rondo eterno. Pero entonces, a Busquets se le cruzaron los cables y decidió cortar con la mano una jugada sin peligro en el campo rival.

El canterano, bastante descentrado durante todo el encuentro, ya había visto una primera amarilla minutos antes por una falta en el centro del campo. Guardiola, que ya tenía pensado sustituirle por Touré Yaya, se lo quería comer cuando, cabizbajo, abandonó el campo hacia el túnel de vestuarios.

Los locales volvieron a sufrir con diez. Ronaldo tuvo su ocasión de cabeza antes de ser sustituido por Benzema, y el punta francés una aún más clara que envió fuera dentro del área pequeña, donde el balón había ido a parar rebotado tras el lanzamiento de un córner.

Pese al acoso visitante, el Barça a estas alturas ya había encontrado su identidad y fabricaba algo de juego a la contra al ritmo de un excelso Iniesta.

Abidal y Messi tuvieron dos ocasiones clarísimas para sentenciar en la recta final, pero el francés cruzó demasiado su disparo y al argentino se le apareció San Iker. Los delanteros blancos también lo intentaron hasta el final del encuentro, pero ayer tarde se toparon con dos centrales superlativos como Puyol y Piqué.

FC Barcelona 1 : Valdés; Alves, Puyol, Piqué, Abidal, Xavi, Sergio Busquets, Keita (Touré Yaya, 66'), Leo Messi, Iniesta y Henry (Ibrahimovic, 51').

Real Madrid 0 : Casillas; Sergio Ramos, Pepe, Albiol, Arbeloa (Raúl, 75'), Lass Diarra, Xabi Alonso, Kaká, Marcelo, Cristiano Ronaldo (Benzema, 66') e Higuaín.

Texto:EFE

Foto:elespectador.com

Reparto de puntos... y de regalos

Cosas del fútbol. El Tenerife logró su primer punto fuera de casa en su peor partido lejos del Heliodoro Rodríguez López. Regaló una hora de juego, en la que renunció a su identidad y puso en bandeja los tres goles al Valladolid, además de una ráfaga de ocasiones en el inicio de la segunda mitad, de la que pudo salir goleado. Luego, el encuentro dio un giro de 180 grados. Los pucelanos se encargaron de devolver, uno a uno, los obsequios recibidos del rival y un empate que parecía imposible a media hora del final, se hizo realidad. De hecho, el conjunto insular pudo llevarse los tres puntos en la última jugada, pero el remate de Ángel se fue alto ante las miradas de incredulidad de los aficionados presentes en Zorrilla.
Explicar mejor el choque puede costar, pero aquí viene el intento. Los de Oltra parecieron renunciar a su fútbol en la primera parte. El balón no pasaba por el centro del campo y la posesión era más blanquivioleta. Mikel Alonso y Ricardo eran meros espectadores cuando tocaba atacar y sufrían cuando llegaba la hora de defender. Ya este no fútbol del Tenerife resultaba incomprensible, y más en un equipo que ha jugado igual hasta en el Bernabéu o El Madrigal, pero no fue lo peor. Mendilibar defendía los saques de esquina y faltas laterales cercanas a su área descolgando dos jugadores para el contraataque. La respuesta insular, tapar en igualdad numérica. Y el resultado, una ocasión vallisoletana que no finalizó bien Diego Costa (5’), una tarjeta amarilla a Ricardo (18’)… y a la tercera el 1-0. El delantero local le gana la partida a Mikel Alonso y bate por bajo a Sergio Aragoneses (27’).
Por si fuera poco este despropósito, y tras una falta directa de Nauzet que Sergio sacó por los pelos (32’), aumentó la renta vallisoletana. Otro error defensivo, que no de la defensa, en un balón interior hacia Canobbio al que derriba Mikel dentro del área. El uruguayo convirtió la pena máxima (34’). Una parada en el relato de la contienda. En Tenerife, la isla de los debates por excelencia, se había hablado y mucho de la conveniencia de alinear a Mikel Alonso y Ricardo en el doble pivote. Se decía que era necesario para que la identidad que trajo a los blanquiazules hasta la Primera División fuera recuperada y los hombres de ataque recibieran en mejores condiciones. Hasta defensivamente se apreciaban ventajas en esta pareja. Pues el fútbol quiso que uno de ellos, el tolosarra, fuera el protagonista negativo hasta ese momento. Y que Ricardo, al que debía complementar y liberar para que ejerciera como eje, casi no apareciera.
Como prueba a lo poco que jugó el Tenerife hasta entonces, la referencia a las ocasiones visitantes en los primeros 45 minutos: una. Ya con 2-0 en el marcador, Nino cabeceó fuera un centro de Omar desde la izquierda (40’). No fue mejor la salida tras el descanso de los visitantes. Fría como casi siempre. Ni tensión ni concentración. Diego Costa casi marca a los 32 segundos ante una defensa dormida. Tres minutos después, Manucho cabeceó un córner que despejó con apuros Sergio Aragoneses (48’). Canobbio estrelló luego un balón en el larguero en un centro-chut desde la izquierda (49’). Fueron tres claras ocasiones para ¿sentenciar?, que acabaron con el gol de Diego Costa, a la salida de un córner, anticipándose a su marcador (49’). Todavía Nauzet volvió a poner a prueba los palos de la portería tinerfeñista (57’) con otro centro-chut.
La cosa pintaba para goleada local. Pero algo cambió. Oltra dio entrada a Ángel y Ayoze y la hinchada local pitó, ¡con 3-0!, un par de pérdidas de los suyos. Y ahí llegó el colapso. El ataque de nervios. O los remordimientos por tanto regalo recibido, que les impulsó a devolverlos. Luis Prieto fue el primero en vestirse de Rey Mago anticipado, dejando un balón en bandeja a Nino, que encaró a Justo Villar y lo fusiló (62’). El balón fue ya blanquiazul hasta el final. Otro mal despeje de la zaga pucelana fue aprovechado más tarde por Ángel, que se estrenó como goleador en la máxima categoría (71’). La afición local se temía lo peor y empezó a abandonar el estadio. Por eso, y para llegar al inicio del Barcelona-Real Madrid.
El Tenerife dejó de sufrir en defensa porque al rival no le duraba el balón. Mendilibar intentó frenar la debacle con los cambios, pero para entonces oponía un equipo resignado a otro confiado en el empate. Nino y Ayoze ya pudieron conseguirlo a la salida de un córner (77’). Las ocasiones no eran claras, pero las llegadas sí eran constantes. A la defensa blanquivioleta, un flan desde el 3-1, sólo le faltaba una cantada de su portero. Y llegó a cinco minutos de la conclusión, en un centro de Ayoze que peinó Ezequiel Luna a la red. El botín recuperado pudo ser aún mayor, si Ángel no llega a rematar alto un centro de Nino desde la izquierda con el tiempo casi cumplido.

Valladolid 3 : Justo Villar (0), Barragán (1), Baraja (1), Luis Prieto (0), Marcos (1), Borja (1), Álvaro Rubio (0), Nauzet Alemán (1), Canobbio (2), Diego Costa (2) y Manucho (1).
En la segunda parte, Font (1) entró por Nauzet (72’); Marquitos (sc) por Canobbio (79’) y Medunjanin (sc) por Manucho.
Tenerife 3 : Sergio Aragoneses, Luna, Manolo Martínez, Pablo Sicilia, Bellvís, Ricardo, Mikel Alonso, Juanlu, Alfaro, Omar y Nino.
Luego, Ángel sustituyó a Juanlu (58’); Ayoze por Omar (66’) y Dinei (81’) por Bellvís.

Goles: 1-0 (27’): Diego Costa le gana la posición a Mikel Alonso y bate por bajo a Sergio Aragoneses.42-0 (34’): Canobbio, de penalty.43-0 (49’): Diego Costa cabecea a la red un córner anticipándose a Pablo Sicilia.43-1 (62’): Nino aprovecha un regalo de Luis Prieto para fusilar a Villar.43-2 (71’): Ángel aprovecha otro regalo defensivo pucelano.43-3 (85’): Luna peina un centro de Ayoze desde la derecha.

Texto:JUAN J. RAMOS, Valladolid
Foto:EFE

Tranquilidad

No fue un gran partido de baloncesto, pero para el Tenerife Rural lo importante era ganar, empezar a coger confianza y esperar que el engranaje del grupo camine. Eso lleva tiempo y habrá que esperar un tramo prudencial, pero todo irá mejor si se va ganando.

El Tenerife Rural sigue teniendo problemas en ataque. Iván Déniz dio más libertad a los suyos para lanzar de fuera e incluso sacó a Iván Rodríguez y a Sergio Pérez de entrada para que estos fueran una amenaza desde el exterior. Funcionaron en un principio, pero había otros problemas que hicieron que el Tenerife Rural no terminara de arrancar, como era el rebote defensivo.

La primera canasta del partido tardó en llegar. Fue en el minuto 2 obra de Gustavo Ayón y, tras el empate a 5 del minuto 5, el conjunto blanquiazul logró tomar una pequeña diferencia en el marcador (13-5), fruto de dos triples de Sergio Pérez e Iván Rodríguez.

Déniz sentó a Pérez y Rodríguez y dio minutos a Julio y a Fergerson, y con un parcial de 0-8, el Cornellá igualó el partido.

Y es que lo que el conjunto insular tenía como su fortaleza, que era la defensa, ayer no fue todo lo intensa que se esperaba, además de que se perdían muchos balones en el rebote defensivo.

El parcial del Cornellá ascendió a 2-13 y terminó ganando el primer cuarto (15-18).

El Tenerife Rural salió diferente en el segundo cuarto. Julio González lideró a su equipo y fue el que puso peligro en el ataque y permitió que sus compañeros pudieran tirar con más comodidad. Además, con Gustavo Ayón en cancha, el grupo insular estaba más metido en el partido y siempre con la seguridad que aporta Lou Roe.

Los mejores minutos del Tenerife hasta el momento fueron los tres últimos del segundo cuarto. Atacaba con acierto y lograba mantener una defensa decente ante un adversario que empezaba a tener problemas.

Con un 40-30 se llegó al descanso, un resultado que no dejaba a nadie tranquilo por lo que se había visto en los primeros veinte minutos.

Y fue así. Aunque los blanquiazules alcanzaron su máxima diferencia en el minuto 24 de partido (49-37), los visitantes empezaron a jugar. Dani Pérez y sus dos norteamericanos -Smith y Joseph- hacían mucho daño a la defensa blanquiazul. Ni el tiempo muerto de Iván Déniz (m.25, 49-42) paró el acierto rival, que llegó a igualar el partido a 50 y a 52.

Pero tanto el entrenador del Tenerife Rural como sus jugadores tenían claro que la victoria se tendría que quedar en casa y empezaron a trabajar con intensidad en defensa. Parados Joseph y Smith, Bravo se convertía en el único peligro rival y conseguía mantener a su equipo dentro del partido.

Pero ya había un cambio de actitud en la defensa, que propiciaba que se beneficiara el ataque. Fergerson anotó y Ayón ayudó para que el cuadro local se fuera con seis puntos de diferencia (61-55) a seis minutos del final. Los aciertos desde el tiro libre hicieron que la ventaja se mantuviera hasta el final.

Tenerife Rural 72 : (15+25+15+17). Boccia (2), Iván Rodríguez (8), Sergio Pérez (6), Ayón (14), Fiorotto (2) -inicial-, Fergerson (12), Julio González (12), Dani González (-), Eric Sánchez (4) y Roe (15).

Cornellá 67 : (18+12+22+15). Smith (19), Dani Pérez (10), Bravo (12), Joseph (13), Samb (11) -inicial-, Hernández (-), Silva (-) y Marzo (2).

Texto:J. SOTOMAYOR, S/C de Tfe.

No pudo ser

El UB La Palma no pudo dar la sorpresa en el Pabellón Javier Imbroda, donde cayó por 81-62. La diferencia final, sin embargo, no refleja los problemas que tuvieron los anfitriones para ganar el partido, como demostraba el 43-40 con el que se alcanzaba el intermedio.

El primer cuarto resultó muy igualado. De hecho, ninguno de los contendientes terminaba de coger la manija del partido, hasta que dos canastas consecutivas de Padgett le dieron la primera ventaja a los insulares (6-10, minuto 4). Un triple de Huertas, pese a todo, evitó que los blanquiazules se distanciaran más allá de esos cuatro puntos en el acto inicial, alcanzándose el final del mismo con un apretado 21-23 gracias a una canasta sobre la bocina de Olmos.

El segundo cuarto transcurrió por los mismos derroteros, esto es, máxima igualdad en el electrónico, aunque Melilla arrancó fuerte con un triple de Juanma Ruiz. Los palmeros, eso sí, no le perdieron la cara al partido y con una intensa defensa y una perfecta selección de tiro mantenían intactas sus opciones de victoria.

Melilla, por su parte, amagaba con marcharse en el marcador después de dos triples de Óscar González (41-34), pero un tiempo muerto de Sanz les cortó el ritmo e incluso propició la remontada tras otros dos triples seguidos, en este caso de Matías Ibarra (41-40, minuto 19). Dos puntos de Huertas cerraron el marcador al descanso (43-40).

En el tercer cuarto cambiaron las tornas, y el conjunto local saltó a la pista con la consigna de apretar al máximo en defensa, y así lo hizo. No en vano, logró un parcial de salida de 7-2 que ampliaba la renta hasta los ocho puntos (50-42), viéndose obligado Rafa Sanz en ese instante a solicitar tiempo muerto.

Pero ni las instrucciones del técnico cordobés fueron suficientes para que su equipo despertara, si bien Melilla no terminó de aprovechar el desacierto del cuadro palmero. Los isleños, de hecho, se acercaron en el tanteador tras un triple de Mena, aunque un tiempo de Gonzalo García despertó a los anfitriones, que con una canasta triple de Ruiz y otra de Huertas dejaron el 61-50 al final del tercer cuarto.

El último acto fue un despropósito del equipo insular, que con poca intensidad defensiva y muchos errores en los lanzamientos permitió a su rival acomodarse.

Con 16 puntos de diferencia (66-50) a falta de ocho minutos para la conclusión del choque, Rafa Sanz intentó reorganizar a su equipo, pero Melilla ya se sentía vencedor y lo confirmó merced al desacierto de un rival que se pasó más de cinco minutos sin anotar su primera canasta en este período (81-62).

Melilla 81 : Huertas (19), Jiménez (2), Robinson (3), Skoldebrand (5), Starosta (10) -inicial-, Riera (2), Ruiz (11), Morentín (9), González (10), García (2) y Coppenrath (8).

UB La Palma 62 : Padgett (10), Palacios (17), Bonhome (2), García (5), Mena (9) -inicial-, Ojeda, Gruber (5), Olmos (4), Ibarra (6), Orfila (4) y Sebas Arrocha.

Texto:ACAN, Melilla

Foto:Gentileza del Diario MELILLA HOY