domingo, 18 de octubre de 2009

El equipo de La Laguna es un líder sólido

Le podría decir lo contrario, o simplemente nada, pero no le mentiré y, además, creo que hoy, antes de contar un partido de rivalidad, es conveniente afirmarlo. El cronista es de La Palma. Sí, del "UB". Cuestión de sangre. Otros son del Madrid, del Barcelona... Ahora bien, el Canarias es un orgullo. Antes siendo pobre y este año en el pelotón de los ricos, sin dinero no se ficha a tanto bueno, la elástica acarrea un sentimiento que se trasmite. De lo contrario, sin ese sentir que se puede, es difícil explicar la victoria tinerfeña. Otros equipos, cualquiera, hubieran agachado la cabeza ante el alma de los "palmeros".

El resumen es sencillo. Fue un "derbi" de calidad. De entrega y destellos de brillantez. El arranque fue igualado. Palacios y Padgett asumieron la ofensiva blanquiazul. Sebas fallaba de tres, pero dentro, en la pintura, el "UB" tenía solvencia. El Canarias buscó a Yáñez, tiró de Donaldson, ahogó a Urreizti... Un 19-16 que sirvió para que La Palma se sintiera capaz, aunque es cierto que Guillén y Rost casi ni habían jugado.

A la vuelta, Rafa Sanz le dio una vuelta de "tuerca" al partido. Apretó al base ajeno, rotó a sus hombres interiores, aprovechó la aparición (con dos triples) de Bonhome, intentó explotar la falta de jugadores ajenos... ellos (los tinerfeños) no sabían a dónde mirar. Si correr o llamar a los "amigos". Es cierto que Guillén apareció por unos instantes, que Rost ya llevaba once puntos... pero La Palma se iba.

Salida del descanso. Alejandro Martínez sentado en el banquillo. Miraba a los jugadores del "UB" mientras pensaba en los suyos. Puso a los "5" más "buenos". Salió con todo. Metió Guillén, respondió Palacios; canasta de Mena, otra de Urreizti... al principio, todo igualado. "Canarias no remontará", le dices al vecino de grada. Heras llama a la puerta. Asoma la cabecita. Los tinerfeños reducen ventajas hasta llegar al final del tercer cuarto, tras el acierto de Rost, con sólo cinco abajo (65-60).

Al "UB" se le encendió la alarma. Jugaba bien, pero el rival era mejor. Sebas entró para meter, pero Heras estaba enganchado. Ya no era sólo la cabeza. Era el cuerpo y el alma. Metió un triple, luego otro, más tarde el tercero... Si eres del "UB", te dan ganas de "morirte". De mentiritas, sólo por un rato, pero lo deseas. Llegas al final igualado. Con 73-74 que luego fue 81-82... decide el dinero. Si tienes, si la cartera está llena, tienes a gente como Guillén. Él asumió al final todo el protagonismo, por delante y por detrás, aunque es cierto, aún con todo, que Sebas Arrocha, con casi cuatro segundos para el final, hizo pasos de salida en la última y decisiva jugada... hubiera sido otra crónica.

UB La Palma 86 : Padgett (13), Gruber (4), Palacios (21), Arrocha (2), Mena (13), -inicial-, Bonhome (6), Olmos (7), Ibarra (1), Orfila (6) y García (13).

Socas Canarias 88: Yañez (8), Urreizti (13), Donaldson (8), Heras (22), Chagoyén (3), -inicial-, Guillén (19), Rost (15), Cage (-).

Texto:V. MARTÍN, S/C de La Palma

Foto:César Borja / UB LA PALMA

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