Una victoria para escaparse al frente del grupo de clasificación es lo que necesita conseguir el Barça hoy frente al Shakhtar en Donetsk, en un campo en el que ha perdido en sus dos visitas anteriores.
Después de cuatro victorias de forma consecutiva, el equipo de Josep Guardiola se encuentra en un buen momento. Su fútbol de ataque convence, aunque necesita apuntalar su defensa, después de haber encajado ocho goles en los ocho encuentros oficiales disputados desde el inicio de la temporada.
El técnico sabe que su equipo tiene problemas con la defensa y que tiene que encontrar el equilibrio atrás y, por ese motivo, la va dando oportunidades a los jugadores de la defensa, concretamente en las posiciones centrales, donde Márquez, Cáceres, Puyol y Piqué se van alternando.
Decidido a darle el protagonismo a la cantera, Sergio Busquets es mi sorpresa agradable de estos primeros partidos, mientras que se ha demostrado que Guardiola únicamente tiene a dos intocables en su equipo: el meta Víctor Valdés y el centrocampista Xavi. Atendiendo a las rotaciones utilizadas en cada partido por el entrenador del Barça, parece lógico que vuelvan al equipo Rafa Márquez y Samuel Eto'o.
El objetivo de los azulgrana es sumar su quinta victoria consecutiva (Sporting de Portugal, Sporting de Gijón, Betis y Espanyol) y, de paso, poner tierra de por medio con el Shakthar, el rival que creo más potente del grupo y que podría poner en entredicho la supremacía de los azulgranas.
Los ucranianos reciben al Barcelona en plena crisis de juego y resultados, que podrían incluso costarle el puesto al técnico rumano Mircea Lucescu.
El Shakhtar es undécimo clasificado entre dieciséis equipos con nueve puntos en otros tantos partidos y una sola victoria, lo que obligó recientemente al capitán, el croata Darijo Srna, a disculparse ante la afición.
Creo que no tenemos que tener problemas para ganar pero tampoco un empate seria un mal resultado contra un equipo que como digo no esta en su mejor momento pero que no se encoje y es un muy buen equipo.
Después de cuatro victorias de forma consecutiva, el equipo de Josep Guardiola se encuentra en un buen momento. Su fútbol de ataque convence, aunque necesita apuntalar su defensa, después de haber encajado ocho goles en los ocho encuentros oficiales disputados desde el inicio de la temporada.
El técnico sabe que su equipo tiene problemas con la defensa y que tiene que encontrar el equilibrio atrás y, por ese motivo, la va dando oportunidades a los jugadores de la defensa, concretamente en las posiciones centrales, donde Márquez, Cáceres, Puyol y Piqué se van alternando.
Decidido a darle el protagonismo a la cantera, Sergio Busquets es mi sorpresa agradable de estos primeros partidos, mientras que se ha demostrado que Guardiola únicamente tiene a dos intocables en su equipo: el meta Víctor Valdés y el centrocampista Xavi. Atendiendo a las rotaciones utilizadas en cada partido por el entrenador del Barça, parece lógico que vuelvan al equipo Rafa Márquez y Samuel Eto'o.
El objetivo de los azulgrana es sumar su quinta victoria consecutiva (Sporting de Portugal, Sporting de Gijón, Betis y Espanyol) y, de paso, poner tierra de por medio con el Shakthar, el rival que creo más potente del grupo y que podría poner en entredicho la supremacía de los azulgranas.
Los ucranianos reciben al Barcelona en plena crisis de juego y resultados, que podrían incluso costarle el puesto al técnico rumano Mircea Lucescu.
El Shakhtar es undécimo clasificado entre dieciséis equipos con nueve puntos en otros tantos partidos y una sola victoria, lo que obligó recientemente al capitán, el croata Darijo Srna, a disculparse ante la afición.
Creo que no tenemos que tener problemas para ganar pero tampoco un empate seria un mal resultado contra un equipo que como digo no esta en su mejor momento pero que no se encoje y es un muy buen equipo.
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