Los Angeles Lakers cayeron en su visita a los Phoenix Suns (118-111) en un partido atípico en el que brillaron las dos grandes estrellas del conjunto angelino, Kobe Bryant y Pau Gasol, pero que se saldó con derrota para los de Phil Jackson.
Y es que el partido fue una clara muestra de que dos jugadores no pueden ganar sólos un partido. El nulo respaldo que tuvieron de sus compañeros empañó el estratosférico partido de Kobe (49 puntos) y Pau Gasol (30) y dejó claro que la clave del éxito del conjunto californiano en su asalto al anillo de la NBA será el papel de los secundarios, inexistente en Phoenix.
La floja defensa de los Lakers la aprovechó a la perfección un hombre que está viviendo su segunda juventud. Shaquille O'Neal, que ya ante Toronto metió 45 puntos el viernes, anotó en esta ocasión 33 y lideró a Phoenix a una merecida victoria.
Los Suns fueron delante en el marcador durante todo el partido y cuando más apretaban los Lakers de la mano de los puntos de Kobe supieron mantener la sangre fría suficiente para llevarse finalmente el partido.
Phoenix Suns 118 (34+32+25+27): Barbosa (22), Richardson (8), ONeal (33), Barnes (26), Hill (17) -cinco inicial-, Amundson (5), Dudley (7), Dragic (-) y López (-).
Los Ángeles Lakers 111 (26+30+25+30): Bryant (49), Fisher (3), Gasol (30), Walton (4), Odom (4) -cinco inicial-, Ariza (9), Powell (6), Farmar (-), Vujacic (6) y Mbenga (-).
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